Javier Peñoñori
Los medios de comunicación audiovisulaes en manos del Estado han sufrido la oxidación propia de la consecuencia de las privatizaciones y concentración monopólica. Los mismos están destinados al vaciamiento de nuestra cultura nacional y popular.
Destinados a incrementar la desmemoria o vaciamiento de la memoria en nuestro pueblo con su historia.
Destinados a la alienación cultural de la misma población con periodistas “formadores o deformadores de opinion” ; en definitiva , los artistas (músicos, escritores, escultores,pintores, y demás) ,podemos interpretar que hoy, rigiendo desde hace ya más de un cuarto de siglo el decreto de la dictadura en los medios de radio difusión, necesitamos al igual que la inmensa mayoría de nuestro pueblo una nueva ley de medios audiovisuales que pueda democratizar los espacios de comunicación desterrando así la censura en democracia, profundizando esta democracia, sus instituciones y fortaleciéndola.
Desde hace muchos años las programaciones, incluidas las de los medios públicos,se manejan con unos pocos artistas y siempre son los mismos, dejando afuera la participación de miles .La misma conducta poseen las editoriales, la misma conducta de las discográficas(multinacionales, grupos empresariales) que digitan la música, la literatura , etc. que les conviene que se consuma, lo que les deja dinero y lo que no es comercial, se desecha .
En definitiva, no se trata como algún folclorista dijo” hace falta que difundan más folclore por las radios”,considero que hace falta otra cosa además de difundir folclore y tango ; que los artistas podamos tener acceso a participar con nuestro trabajo (grabaciones, interpretaciones, ediciones literarias , etc) en espacios democratizados sin antes tener que pasar por filtros de “selección” en los diversos medios . Es la única forma que podamos ser partícipes y artífices de un proyecto nacional y popular que esté acorde con los nuevos vientos que soplan en nuestro continente suramericano; siendo coherentes mostrando que los artistas no seguimos guardando silencio y entreteniendo haciendo el papel de bufones con cualquier político de turno, sino comprometiéndonos frente a la realidad que nos molesta, teniendo presente el decir de Atahualpa Yupanqui :”Mi tierra, te están cambiando . . . “Le tengo rabia al silencio” lo cual es muy real y actual, nos invita con mayor razón a abrirnos caminos con nuestras opiniones y acciones prácticas.
Los artistas con juicio crítico junto a los periodistas tenemos la necesidad de participar colectivamente no guardando silencio sino participando de este cambio necesario.
"Arte liberador;Ética liberadora, Libertad para crear y crear para la libertad”
Javier Peñoñori
Músico Compositor Escritor
sábado, 18 de julio de 2009
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