Nueva Ley de Medios : Liberar la palabra

por Javier Peñoñori


“Seamos libres, lo demás no importa nada”
José de San Martín


Recuperar la palabra es recuperar la libertad. “ Hacer oir nuestras voces”, decía Olga Garay integrante de una comunidad originaria tartaranieta del cacique Andrés Raninqueo.

Es sospechosa la trama de silencios, años de silencios forzados – palabras encarceladas . Hombres que se las apropiaron y creen estar en derecho de sentirse “habilitados a la palabra” desde hace centurias, apellidos escogidos y creyéndose “elegidos” arrasaron con nuestros pueblos y sus palabras, adueñándose de nuestras tierras y sus riquezas.

Las palabras son hoy el principal terreno de lucha.

Los pueblos originarios piden, exigen y junto con ellos nosotros, la mayoría también silenciada por leyes de la última dictadura , ser reconocidos y ello significa tener acceso a la tierra, su tierra y la palabra en su lengua originaria.

¿Quiénes privatizaron la palabra? Los mismos que se robaron sus tierras. Los señores terratenientes y empresarios dueños hoy, de centenares de medios de comunicación.

Les molesta que hoy de aprobarse una nueva ley de medios de comunicación podamos tener acceso, para que la población pueda enterarse de nuestra existencia; porque hasta ahora, todos los gobiernos cuando hablan de Cultura ancestral, han terminado haciendo museos, utilizando a nuestros hermanos de 35 comunidades Originarias como piezas de estudio antropolólgico,arqueológico, sociológico y también como objetos para el turismo.

Será entonces hacer justicia, poder recuperar la palabra, liberar la palabra . Hacer justicia de las vidas de millones de hermanos que fueron asesinados por el General Roca.
Hoy asistimos a una segunda campaña al desierto, desde hace 30 años como fue el accionar de la dictadura cívico-militar. Esto se hizo apoderándose de los medios de comunicación, realizando el negocio de papel prensa, además de asesinar, desapareciendo las voces de más de 30.000 compañeros/as y apropiarse de la vida de bebés nacidos en cautiverio. Digo las voces , pues sus ideales y pensamientos, no los pudieron comprar, no los pudieron privatizar, ni distorsionar ; siguen hoy intactos a través de millones de voces dispuestas a no olvidar ni perdonar .Esto es lo que debemos mantener vivo, rescatando, recuperando el poder decir la palabra , hoy, monopolizada y censurada.

Los pueblos originarios como parte de la diversidad cultural del pueblo argentino reclama que sean reconocidos sus derechos a la COMUNICACIÓN INDÍGENA CON IDENTIDAD, lo cual es esencial para una ley de comunicación verdaderamente democrática. Esto es fundamental para la construcción de un país que reconozca esta diversidad cultural como un derecho de todos y todas .

Reclamamos que se cumpla lo establecido en
la Declaración Universal de los Derechos de los Pueblos Indígenas – ONU (2007)
Artículo 16 :Derecho a la información.

1º Los pueblos indígenas tienen derecho a establecer sus propios medios de información en sus propios idiomas y a acceder a todos los demás medios de información no indígenas sin discriminación .
2º Los Estados adoptarán medidas eficaces para asegurar que los medios de información públicos reflejen debidamente la diversidad cultural indígena. Los Estados, sin perjuicio de la obligación de asegurar plenamente la libertad de expresión, deberán alentar a los medios de información privados a reflejar debidamente la diversidad cultural indígena .

También que se respete y cumpla con la Constitución Argentina (1994)
Artículo 75, inc.17.

Reconocer la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas argentinos.
Garantizar el respeto a su identidad y el derecho a una educación bilingüe e intercultural; reconocer la personería jurídica de sus comunidades y la posesión y propiedad comunitarias de las tierras que tradicionalmente ocupan ; y regular la entrega de otras aptas y suficientes para el desarrollo humano; ninguna de ellas será enajenable, transmisible ni susceptible de gravámenes o embargos . Asegurar su participación en la gestión referida a sus recursos naturales y a los demás intereses que los afecten.
Las provincias pueden ejercer concurrentemente estas atribuciones.

Por ello rescato y reactualizo las palabras de Atahualpa. Yupanqui : “Que no se quede callado quien quiera vivir feliz” ; de esto se trata , hoy más vigente que nunca , a lo que agrego : plantar las palabras nuevamente , plantarlas desde esa utopía de la equidad, necesitándonos volver a repensarnos una y otra vez . Socializando las palabras, socializando las líneas de comunicación, de información audiovisuales, para recibir y emitir con libertad nuestros diversos pensares .Interacturar en función de profundizar una necesaria batalla educacional y cultural . Poder recuperar el poder decir .

¿Quiénes son los que temen escuchar lo que nos falta? Quizás aquellas minorías que precisamente al quitarnos casi todo, nos dejaron casi nada.

Los mismos que el jueves 10 de setiembre de 2009, dentro del mismo Congreso, se reunieron sin verguenzas con el Sr Cobos, en una actitud claramente destituyente.

Los mismos que se oponen al UNASUR, que se oponen a la construcción de la Patria Grande de los países de suramérica , los mismos que aceptan las bases yanquis en Colombia y aplauden el golpe de estado en Honduras.

¿Quiénes temen liberar la palabra? Aquellas minorías poderosas , que se adueñaron de nuestras palabras , los que monopolizaron las palabras; los que la privatizaron , privándonos de las palabras que nos pertenecen .

Esta minoría bicentenaria no quiere esta NUEVA LEY DE COMUNICACIÓN de la Democracia. Les sirve continuar con la ley de la dictadura, la misma que permitió a los monopolios comprar radios para ir destruyendo otros medios .

Estamos ante un momento crucial . Hemos visto, escuchado durante varios días y meses en distintos foros realizados en diversas provincias, durante varios días de Audiencias Públicas en el mismo Congreso, la voz de una multilplicidad de movimientos, organizaciones, ONG´s , Universidades, sindicatos, ciudades del interior, hasta el día viernes 11 de setiembre; al mismo periodista Victor Hugo Morales expresarse con claridad y fundamentos a favor de esta nueva Ley.

Algunos diputados o senadores, al igual que algunos periodístas que son receptores de sobres,dejándose sobornar, se oponen a la nueva ley y es muy evidente que: defienden la corrupción que han mantenido hasta hoy los grupos monopólicos, para hacer sus grandes y sucios negocios como lo hicieron con el futbol y son los que desde ya, no les agrada cuando se habla de la investigación de “apropiación de bebés nacidos en cautiverio, en plena dictadura”.

La mayoría de nuestro pueblo, que desconoce lo antes relatado , aprobándose esta NUEVA LEY DE COMUNICACION AUDIOVISUAL, se enterarían de que existe otra Argentina , con otra historia para ser contada ; como también se enterarían de la existencia de la diversidad de nuestras culturas regionales, idiomas, ostumbres, etc. y desde ya de nuestras carencias. De la necesidad de respetar, federal y regionalmente las provincias.

Ver qué hay detrás de la tan deseada mantención del silencio, a la que esta minoría “opositora” se aferra .¿Qué tramas existen detrás de lo que tanto quieren que se calle? .

La palabra, es hoy el terreno de una lucha imprescindible e inevitable. Esta diversidad de culturas y de expresiones que ocupan nuestra extensa geografía, hablamos de la gran mayoría de nuestro pueblo argentino, necesita profundizar el camino de recuperar totalmente su soberanía y su independencia , luchando por la estabilidad de esta Democracia y profundizándola; para ello hace falta contar con una Nueva Ley de Medios para LIBERAR LA PALABRA, hoy presa de los monopolios.

“Arte liberador, ética liberadora, libertad para crear, crear para la libertad”

Javier Peñoñori

guitarrista,compositor y escritor argentino - 11 de setiembre de 2009

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